La IA impactará en distintas áreas del sector de las telecomunicaciones. Pero serán dos los segmentos en donde se advierte un mayor aprovechamiento: a nivel de la infraestructura y a nivel de la oferta comercial. Pantallazo sobre cómo impactará en cada uno de ellos.
Que ChatGPT, que big data, que machine learning, que el algoritmo de aquí y de allá, que… la lista de pros y contras de la inteligencia artificial parece no tener fin. La tecnología está entre nosotros, y como toda evolución hay que conocerla para saber qué puede aportar. Con el sector de las telecomunicaciones sucede lo mismo. Por el momento, su impacto en este mercado parece ir por dos vertientes: la de la infraestructura de redes, y la de la oferta comercial.
La inteligencia artificial es una capacidad cognitiva que se expresa por medio de algoritmos con el objetivo de crear máquinas que imiten la inteligencia humana para realizar tareas, incluso mejor o más rápido que ella. Tiene la capacidad de reemplazo, por supuesto. Pero también la de colaborar en las profesiones y las labores cotidianas. Valerse de ella forma parte de este segundo objetivo.
Pero aquí hablamos de telecomunicaciones, de redes, de esos vasos capilares que envuelven al mundo mediante los cuales se generan millones de datos por segundo. En 2022 se traficaron más de 48 exabytes de datos a través de DE-CIX, el mayor punto de intercambio de tráfico de internet (IXP, por su sigla en inglés) del mundo. Esto fue un 25% superior a 2021, cuando todavía existían restricciones en el marco de la pandemia. En el planeta existen unos 150 IXPs.
Durante el Mundial de Qatar se registró el mayor caudal de datos jamás intercambiado antes entre todos los puntos de interconexión de DE-CIX, más precisamente el 14 de diciembre, cuando se disputó la semifinal del campeonato entre Francia y Marruecos. Ese día 132 terabytes de datos por minuto se cruzaron en este punto de interconexión equivalente a un flujo de video HD de cinco años de duración.
Esta foto parcial sobre el crecimiento de la producción de datos muestra que la gestión de las redes se vuelve cada vez más compleja. La inteligencia artificial aplicada a las telecomunicaciones tiene como objetivo reducir esos niveles de dificultad.
A nivel de la infraestructura permite automatizar ciertas funciones de red. De este modo, se optimiza su desempeño en función del tráfico de información que recibe de las distintas regiones y zonas horarias. Puede mejorar la calidad del servicio al clasificar automáticamente ese volumen de datos que está fluyendo por las redes.
IA aplicaciones concretas
- Las torres y antenas de telecomunicaciones también son otro escenario en donde la automatización mediante inteligencia artificial puede mejorar la operación. La instalación de cámaras que permiten monitorear a distancia el equipamiento instalado es más eficiente que estar enviando personal a realizar esa tarea. El personal es dirigido sólo en los casos en que es necesario.
- Del lado de los servicios, la inteligencia artificial puede ayudar a las operadoras de telecomunicaciones a brindar prestaciones mucho más personalizadas y segmentadas, en función del volumen de datos que se generan y trafican en sus redes. El análisis predictivo permite anticiparse a ciertas situaciones y habilitar la toma de decisiones en tiempo real. Basta imaginar todos los servicios que podrían haberse creado a partir del flujo de información que se produjo durante el Mundial de Qatar.
Pero aún estamos en el principio del camino. A medida que se extiende el uso de algoritmos, se estima que será posible diseñar estrategias de más largo plazo, como la creación de experiencias de servicio al cliente automatizadas, además de gestionar las demandas comerciales de manera más eficiente.
En la actualidad, uno de los usos más extendidos de la inteligencia artificial en las operadoras de telecomunicaciones es el de chatbots para atención al cliente. En la mayoría de los casos, esos asistentes virtuales están en período de aprendizaje.
No obstante, ese bagaje de datos que van gestionando apunta a que, en el futuro, puedan resolver cuestiones mucho más complejas que, simplemente, responder cuándo vence la tarjeta de crédito o cuándo se acreditará el dinero depositado en el broker online.
Sólo por mencionar un caso que prácticamente resuelve en los dos niveles. En Estados Unidos, AT&T está implementando el machine learning para mejorar la gestión de incidentes de extremo a extremo a través de la detección de problemas de la red en tiempo real. La inteligencia artificial aplicada al mantenimiento predictivo tiene capacidad para detectar 15 millones de alarmas por día y restaurar el servicio antes que los clientes se den cuenta de un corte o una interrupción. También usa el análisis de video capturado por drones para mantener sus torres de servicios móviles y brindar soporte técnico.
El futuro de la IA en telecomunicaciones se vislumbra prometedor. Pero aún hay un largo camino por recorrer.
Ilustración: DG Ailén Fernández